La lectura es uno de los hábitos más hermosos y polémicos, debido a que no hay detractores pero tampoco los suficientes practicantes. Parte esencial de la narrativa son aquellas referencias a otros títulos (ficticios o no), lugares, episodios de la historia, música, conversaciones, climas, pinturas, esculturas; entre otros.
Frecuentemente me generan curiosidad algunos representantes de la lista anterior y los busco (bendito Internet), siendo que la música le brinda una especie de soundtrack a la lectura; permitiéndome asociar ambas.
Hace poco decidí ir tomando un libro en casa de mis padres y leerlo solo en el contexto del tiempo que paso con ellos, a modo de tener un libro siempre acompañando mi mesa de noche. EL DOCTOR FISHER de Graham Green es quien abre esta intención, y con ella, nos trae la Sinfonía #41 Júpiter de Mozart.